viernes, 2 de mayo de 2008

“ ¡Y a mí que más me da!, ¡Que siga la farsa! ”

EDITORIAL del DR. NEOCÓN
Cuidadito con la farsa, no vaya a ser que con tanto jugar a eso del pluralismo dentro del PP generemos expectativas en militantes despistados.

Tiene que quedar claro que lo que se debe hacer es montar bien la farsa de que en el PP hay intención de renovar el discurso.(Insisto: el discurso que no la práctica).

Pero las cosas claras, aquí no se mueve ni Dios(es una forma coloquial de hablar), hay que escenificar que cambian cosas para que no cambie nada.

Esperanzita no lo está haciendo mal del todo, pues se trata de hacer olvidar cuanto antes nuestro discurso anterior, aunque en los hechos y en el fondo seamos lo mismo; así hay que continuar en la línea de transmitir que somos gente moderna, liberal y moderada, además de que poseemos autonomía de los poderes eclesiásticos y monetarios.

Ahora bien, esta Esperanzita se está pasando tres pueblos con su inquietud por aquello de que se le puede pasar el arroz para poder ser candidata o lidereza. Hay que pedirle que se serene y atarla un poquito en corto porque a estos aristócratas a veces se les va la cabeza y les sale la vena de “divinos”. Al parecer les suelen dar de vez en cuando convulsiones feudales.

Así que hay que recolocar a algunos quemados/as y a seguir con lo mismo, velando por no correr riesgos innecesarios no vaya a ser que algún liberal de los que aún queda en nuestro proyecto ultracapitalista y ultraconservador nos fastidie la fiesta.

Adelante pues con el proceso pero sin pasarse, porque además a mi y a nuestros amos y señores “que más nos da Pepe que Juan, Mariquilla que Soledad”; lo que nos interesa es un partido títere, un juguete para la democracia, que vele por nuestros intereses de verdad: “EL TACO”; pero haciéndolo bien, es decir, sin que se note mucho.

Disculpadme estos casi dos meses de relax, pues he estado de ejercicios espirituales que me han permitido reflexionar después del descalabro electoral en nuestra admirada España; y en el último mes he estado asesorando a nuestro amigo “el Duche Berlusconi”.

Siempre nos quedará el queridísimo Vaticano, y como no, la maravillosa Italia.

Vuestro admirado Prof.- El Dr. Neocón